(Cundinamarca, 10 de junio de 2022). Con el fin de mantener la continua vigilancia del nivel del río Bogotá y debido a las importantes lluvias que se han presentado en el departamento durante los últimos días, la Gobernación, a través de la Unidad Administrativa Especial para Gestión del Riesgo de Desastres (Uaegrd), instaló un Puesto de Mando Unificado PMU permanente, a través del cual se tomarán las medidas respecto a eventuales situaciones de riesgo, como los desbordamientos que ya se presentan en algunos municipios.
“Tenemos municipios con afectaciones, como Nemocón, Sopó, Chía, Gachancipá, Tocancipá y una alerta en Soacha. El monitoreo se extiende hasta la cuenca baja y hasta el río Magdalena inclusive”, indicó Nicolás García Bustos, gobernador de Cundinamarca.
También se mencionó la necesidad de mantenerse al tanto de la situación de otros recursos hídricos del departamento como los embalses del Sisga, Tominé y, principalmente, del Neusa, el cual encuentra cerca del 100% de su capacidad.
Al respecto, el Gobernador indicó que “debemos reconocer el extraordinario trabajo de los funcionarios de la CAR, en la adecuación hidráulica, lo que ha hecho que las afectaciones que tengamos hasta este momento sean mínimos frente a los que hubiéramos podido tener en otros escenarios”.
Se espera que, a través de sobrevuelos de helicópteros y drones, y recorridos en botes de parte de las autoridades, sea posible determinar no únicamente afectaciones en terrenos y cultivos, sino también identificar viviendas en riesgo, con el fin de contemplar la posibilidad de eventuales evacuaciones y establecimiento de refugios temporales.
Al respecto, la Cruz Roja recomienda también a las administraciones municipales reportar estas construcciones que se pudieran encontrar en riesgo de inundación o deslizamiento, para determinar la necesidad de trasladar de reubicar de manera temporal a sus habitantes.
Cabe resaltar que este PMU se lleva a cabo gracias al trabajo articulado de instituciones como el Ideam, CAR, Defensa Civil, Cuerpo de Bomberos de Cundinamarca y la Cruz Roja, con el fin de prevenir hechos que lamentar.
