(Cundinamarca, 30 de julio de 2020). Hoy se conmemora el Día Nacional de la Vida Silvestre, una fecha creada para que los colombianos hagamos conciencia y no apoyemos el tráfico ilegal de fauna y flora, en donde Cundinamarca cuenta con el 13% de ecosistemas estratégicos ambientales del país y no es ajena a esta lamentable y fraudulenta actividad; aproximadamente 72 especies entre aves, mamíferos, anfibios y reptiles que habitan el territorio, son los que están con algún grado de amenaza.
“El llamado que hacemos desde la Secretaria del Ambiente es a reportar ante las autoridades competentes este tráfico de caza o muerte de animales como: el oso de anteojos, el venado de cola blanca, el pez capitán, el pato andino, micos, tortugas, loros, entre otros, considerados en la categoría vulnerable de extinción, por un comercio ilegal en el que además se encuentran plantas exóticas como palmas, quiches y frailejones que pertenecen a nuestros bosques y páramos”, señaló, Nidia Clemencia Riaño Rincón, Secretaría del Ambiente.
Las joyas de la naturaleza que tiene Cundinamarca son innumerables, la colección de flora y fauna es extensa, pero factores como la deforestación han llevado a que el número de animales que están en peligro vaya en aumento, además de la desafortunada ganadería extensiva, por eso es de suma importancia estar atentos y fortalecer la conservación de los ecosistemas, generando prácticas sostenibles y la promoción de una relación amigable con el ambiente. Lo cual implica un cambio de actitud y comportamiento en nuestras acciones diarias.
Es la oportunidad para que, en los 116 municipios de Cundinamarca, sus pobladores denuncien el tráfico de vida silvestre, especies que han desaparecido de los estrechos valles o montañas de la región, acarreando consecuencias negativas de gran alcance en el ámbito económico, ambiental y social, representado en una riqueza natural en zonas declaradas como áreas protegidas, algunas de carácter nacional y otras regional.
“Y es dentro de este contexto que venimos trabajando en el programa de seguridad hídrica y recursos naturales para la vida, que avanza para conservar y proteger la biodiversidad, a fin de garantizar los servicios ambientales, evitar la pérdida del hábitat de la fauna y flora presentes y aumentar la oferta del recurso hídrico, mejorando el acceso a los servicios de agua potable y saneamiento básico, con calidad, continuidad y cobertura en zonas urbanas y rurales”, Finalizó, Nidia Riaño.
